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León Tolstoi

La felicidad conyugal

Una novia deambula, taciturna, en las vísperas de su boda, por los bosques de su casa. Joven, casi niña, sumisa, delirante en esos sueños adolescentes donde la promesa del amor eterno empapa y ofusca la visión de la realidad, sueña en el futuro que vendrá, con su próximo marido a ser. Sin embargo, los sueños jóvenes que alguna vez la condujeron, se verán cambiados por el paso del tiempo, la exposición a nuevos ambientes, a un estatus social que no sabía que anhelaba, y la obvia diferencia de edad que tiene con su esposo.

En pocas palabras, Tolstoi nos describe la vida y muerte del amor; desde su nacimiento, lleno de pasión y ternura, hasta la dolorosa aceptación de su muerte. "¿Acaso puede haber algo mejor? Una lucha de generosidades. ¿No es eso la felicidad conyugal?"
121 páginas impresas
Propietario de los derechos de autor
Bookwire
Publicación original
2020
Año de publicación
2020
Editorial
Editorial Cõ
Traductor
Selma Ancira
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Opiniones

    Rosy Antuñanocompartió su opiniónhace 10 meses
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    🎯Justo en el blanco

    Gelivmecompartió su opiniónel año pasado
    👍Me gustó

    denismorgesca1compartió su opiniónhace 4 años
    👍Me gustó

Citas

    Dianela Villicaña Denacompartió una citael año pasado
    —¿Y no quieres nada?—pregunté.
    —Nada imposible—respondió, adivinando lo que yo sentía—. Tú te mojas la cabeza—añadió acariciándome como si fuese una niña y pasando una vez más su mano por mis cabellos—, y envidias a las hojas y a la hierba porque las moja la lluvia. Te gustaría ser la hierba y las hojas, y también la lluvia. Yo sólo me alegro de que existan, como me alegro de todo lo que en este mundo tiene belleza, juventud y felicidad
    Beatriz ACcompartió una citahace 2 meses
    Ahora me resulta difícil recordar y comprender esos sueños que entonces colmaban mi fantasía. Y cuando logro recordarlos, me cuesta creer que esos fueran mis sueños. Así de extraños y de alejados de la vida estaban.
    Beatriz ACcompartió una citahace 2 meses
    No, no sólo señorita, una mala señorita que sólo se siente viva cuando la admiran, pero en cuanto se queda sola, se marchita y nada le hace gracia; todo para presumir, y nada para sí misma.

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