El año en que el mundo se detuvo

Muero por leer a Olivia Teroba y, si se puede, por respirar bajo el agua.

Ka es una mujer como muchas, llena de fantasmas que la habitan y que quisiera entender: el de una madre que no está, el de un amor que no entendió y el de todos esos autores que le hacen compañía mientras está en esa búsqueda. Ka somos todas.

He seguido a Elena Medel a través de las redes y su primera novela llega para retratar la compleja relación madre-hija, sus afectos, pero también sus carencias. Las maravillas es una novela situada en España en dos épocas distintas, «un retrato lírico y honesto de dos mujeres trabajadoras».

Sabemos lo difícil que es crecer, ¿no? Pues este libro va de eso, de cómo duele el cuerpo y el corazón al no saber qué es eso que cada vez parece más aterrador al mismo tiempo que encantador, que a fin de cuentas es el mundo que habitamos. Desde que salió este libro quiero leerlo, pero sé que está esperando el momento para que nos encontremos.

Tener la certeza de no querer ser madre y, al mismo tiempo, cuidar de quienes sí quieren serlo, de quienes lo son. Laura, Alina y Doris son mujeres que comparten el vínculo de la sororidad, pero también los cuestionamientos de muchas mujeres que se enfrentan a un mundo donde deben romper paradigmas.

Leí Grados de miopía de Andrea Chapela y supe que debía permanecer atenta a todo lo que hiciera. Una voz inteligente que llega con estos relatos a la ciencia ficción y, a partir de este género, pone sobre la mesa los afectos y los vínculos humanos.

Desde que el internet me permitió conocer a Eleonora [por ahí del 2006], he reconocido la emoción que habita en sus letras. Mejor conocida como @aldeapardo en Instagram, la autora de Cuatro norte cuenta la historia de la amistad femenina, de la complicidad que habita en cuatro mujeres que comparten un secreto.

Un libro tan polémico como necesario en el que se cuenta la historia de un profesor que seduce a una alumna menor de edad. Escalofriante y lleno de verdades sobre lo que implica una relación de poder encubierta por la palabra amor, cuya protagonista muchos años después logra nombrar como lo que es: abuso.

Un herbario en prosa de una mujer que nos enseña a vivir en el instante. Una rareza que se publica este año que hemos decidido observar con más calma las plantas, que decidimos salir a comprar flores por nuestra cuenta; el mismo año que se cumplen cien años del nacimiento de una de las voces más potentes de la literatura.

Uno de los libros más esperados de la primera mitad del 2020 por ser simple y llanamente una de esas historias que hablan sobre libros y escritores y que te permiten perderte un rato. Lo tengo en mi lista de pendientes porque siento que necesito ese tipo de ficción que podría parecerse a la realidad de cualquier otro año.

Un ensayo autobiográfico sobre lo que es ser mujer y millennial en el mundo laboral actual, donde los sueños se intercambian por trabajos mal pagados que acaban con la salud mental y con la poca fe que se tenía en el mundo. Anna Wiener es una voz clara y contundente que nos invita a replantearnos qué tanto estamos dispuestos a intercambiar por esos trabajos que parecen ideales.