Este es probablemente el libro más personal de cuantos acometió Alfonso Reyes en sus últimos años. El título que se da a esta colección de ensayos procede de «El criticón», la novela filosófica de Gracián, donde Andrenio, un niño abandonado y criado por las fieras crece figurándose ser una de ellas. Por aquella apartada isla de Santa Elena cae un náufrago, Critilo, y encamina poco a poco a Andrenio hacia su condición humana: Critilo viene a ser el Criterio; Andrenio, el Hombre.