Libros
Carolyn Steel

Ciudades hambrientas

La comida da forma a las ciudades y moldea el campo que las abastece. Podría decirse que alimentar ciudades tiene un impacto sobre nosotros y nuestro planeta mucho mayor que cualquier otra actividad humana. Sin embargo, pocos ciudadanos occidentales somos conscientes del proceso. La comida llega a nuestros platos como por arte de magia, y rara vez nos paramos a preguntarnos cómo ha llegado allí.
Pensando que, para una ciudad como Londres, todos los días se debe producir, importar, vender, cocinar, comer y eliminar nuevamente unos treinta millones de comidas, y que esto sucede a diario con cada ciudad del mundo, resulta sorprendente que quienes vivimos en los núcleos urbanos consigamos comer.
Ciudades hambrientas es un libro sobre cómo comen las ciudades, un estudio insólito y revolucionario que examina la forma en que la producción moderna de alimentos ha dañado el equilibrio de la existencia humana y revela un dilema centenario aún por resolver, que podría ser la clave para muchos problemas actuales como la obesidad, el inexorable aumento de los supermercados o la destrucción del mundo natural. Una llamada de advertencia sobre el desperdicio y la destrucción causada por los sistemas alimentarios actuales, y una guía para corregir sus errores.
636 páginas impresas
Propietario de los derechos de autor
Bookwire
Publicación original
2020
Año de publicación
2020
¿Ya lo leíste? ¿Qué te pareció?
👍👎

Opiniones

  • Yatzel Roldáncompartió su opiniónhace 3 años
    👍Me gustó
    💡He aprendido mucho

    En la vida cotidiana no pensamos en la importancia de los alimentos y los desechos generados de ellos para el diseño de las ciudades. En este libro, Carolyn Steel nos cuenta la manera en que Londres y otras ciudades se conformaron debido a las redes de distribución alimentaria, los mercados y supermercados y más elementos implicados.

Citas

  • Yatzel Roldáncompartió una citahace 3 años
    Una de las razones de que el miedo a la comida arraigara de forma tan poderosa en nuestros antepasados victorianos fue que muy pocos de ellos sabían cocinar. La migración masiva a las ciudades había apartado a muchas personas de sus vínculos tradicionales con la comida, y pocos habitantes urbanos cocinaban gran cosa para sí mismos. Las clases medias lo consideraban algo indigno, mientras que los pobres carecían de los medios para hacerlo
  • Montserrat Macías Torrescompartió una citahace 7 meses
    , para una nación que se recuperaba de la austeridad, la perspectiva de obtener comida barata era demasiado atractiva como para poner objeciones a la forma en que se producía.
  • Montserrat Macías Torrescompartió una citahace 7 meses
    Carson demostró que, al matar indiscriminadamente a casi todos los insectos, el DDT tuvo un efecto devastador no solo sobre sus pretendidas víctimas, sino también sobre el resto de la cadena alimentaria, pues pasaba directamente a las aves y, por último, a los seres humanos, produciendo cáncer y otras enfermedades. Carson sostenía que en el futuro la primavera sería silenciosa, ya que no quedarían pájaros que cantaran.

En las estanterías

fb2epub
Arrastra y suelta tus archivos (no más de 5 por vez)