—Jack, puedo encargarme de ello. Realmente no tienes que…
—No tienes que encargarte de todo tú sola. Yo estoy aquí. Soy capaz de mover una estantería.
—Ya lo sé. Por supuesto que lo eres, pero estoy diciendo que no tienes que hacerlo. Estoy acostumbrada a manejar las cosas por mi cuenta, y eso es con lo que me siento cómoda