El abuelo Tomatías falleció. Todos están muy tristes, pero Lobo menos que todos, porque antes de morir, su abuelo le enseñó a buscar los rastros de los que se van. Ahora Lobo y su hermana menor seguirán el rastro de Tomatías hasta encontrarlo en la cosa más maravillosa del mundo.
Un libro tierno que nos enseña que las pérdidas no son absolutas, sino parte de lo que somos. Un cuento para recordar que nadie se va por completo.
Todos nos vamos, pero mientras vivimos dejamos trozos de nosotros mismos en las cosas, en la gente.
Paola Ruizcompartió una citahace 10 días
Por eso al principio todos pensamos que se estaba haciendo el dormido nada más por molestarnos, que era su actividad preferida en este mundo. Solo yo sé lo que en verdad pasó: Tomatías quiso seguir la broma aunque ya estuviera muerto.
Fernanda Briseñocompartió una citael mes pasado
Aunque, ahora que lo pienso, tus ojos más bien parecen ríos con mucha prisa por llegar a quién sabe dónde. ¿A dónde van?
¿Por qué siempre tengo prisa por todo? Es como si estuviera en una carrera, un loop