bookmate game
Charles H.Spurgeon,Audie G. Lewis

A los pies del Maestro

Avisarme cuando se agregue el libro
Para leer este libro carga un archivo EPUB o FB2 en Bookmate. ¿Cómo puedo cargar un libro?
  • onurtoribiocompartió una citahace 5 años
    a quien Jesús ama, cultiva un afecto fuerte y deja que tu naturaleza sea tierna y gentil
  • onurtoribiocompartió una citahace 5 años
    La meditación, la contemplación, la oración, la alabanza y la obediencia diaria mantienen la casa en orden para el Señor.
  • Willson Barrientoscompartió una citahace 5 años
    El pecado es ese poder malvado que está en el mundo en rebelión contra el poder bueno y misericordioso de la justicia que está en el trono de Dios. Este poder maligno de impiedad, falsedad, pecado y oposición a la mente de Dios en este momento tiene bajo su dominio a la gran masa de nuestros semejantes. Las raciones con las que este gratifica el valor más desesperado de sus campeones es la muerte.

    La muerte es el resultado natural de todo pecado. Cuando un hombre actúa según el orden de Dios, vive; pero cuando quebranta las leyes de su Hacedor, se destruye a sí mismo y hace aquello que causa la muerte. Cuando cualquier hombre comete pecado, muere a la santidad y a la pureza. Mientras más lejos va un hombre en lujuria e iniquidad, más muerto se vuelve a la pureza y a la santidad: pierde el poder para apreciar las bellezas de la virtud o para sentir repulsión con las abominaciones de los vicios.
  • Willson Barrientoscompartió una citahace 5 años
    La fe debe obedecer a la voluntad del Salvador así como confiar en su gracia. Desde el momento en que nos convertimos en cristianos, salvados por Cristo, nos convertimos en sus siervos para obedecer todos sus mandamientos. Por lo tanto, nos corresponde escudriñar las Escrituras para conocer cuál es la voluntad de nuestro Maestro. Ahí él la ha escrito en letras claras y es un acto de desobediencia descuidar esta búsqueda. Al rehusarnos conocer cuál es la voluntad del Señor, el pecado de ignorancia se vuelve voluntarioso porque no usamos los medios mediante los cuales pudiéramos recibir instrucción. Cada siervo de Cristo está obligado a saber lo que tiene que hacer y entonces, cuando lo sepa, debe hacerlo de una vez. El primer negocio del hombre cristiano es conocer la voluntad de Cristo y el segundo, hacerla. Una vez aprendido esto, esa voluntad es la ley suprema del cristiano no importa lo que parezca oponérsele.
  • Willson Barrientoscompartió una citahace 5 años
    ¿Quieres que le pongan tu nombre a todo lo que haces? Procura que Dios no te permita satisfacer tu deseo y luego te diga: «Ahí tienes, has hecho eso para ti, así que puedes premiarte a ti mismo por eso». Siempre que puedas, mantén tu nombre fuera de todo el trabajo que haces para el Señor
  • Willson Barrientoscompartió una citahace 5 años
    Violencia sagrada
    La oración del justo es poderosa y eficaz.

    SANTIAGO 5:16

    Nunca desistas en tus oraciones. Ningún tiempo es malo para orar. El resplandor de la luz del día no debe tentarte a desistir y la oscuridad de la medianoche no debe hacerte interrumpir tu clamor. Yo sé que uno de los objetivos principales de Satanás es hacer que los cristianos dejen de orar, porque si él pudiera aunque fuera una vez levantar el arma de la oración, fácilmente nos vencería y nos tomaría como su presa. Pero mientras sigamos clamando al Altísimo, Satanás no puede devorar ni a la más débil de las ovejas del rebaño. La oración, la oración poderosa, prevalecerá si se le da el tiempo necesario.

    Y aunque nunca desistas de confiar ni de orar, crece con más fervor en ambas. Deja que tu fe esté aun más dispuesta a renunciar a toda dependencia que no sea en Dios, y deja que tu clamor se vuelva más y más vehemente. La puerta de la misericordia no se abre con cualquier toque, el que prevalezca debe sujetar bien la aldaba y dejarla caer una y otra vez, y otra vez y otra vez. Como dice el viejo refrán puritano: «Las oraciones frías piden denegación, las oraciones que prevalecen son las oraciones calientes». Trae tus oraciones a la puerta del cielo como si fueran un antiguo ariete y ábrela a la fuerza con violencia sagrada porque «el reino de los cielos sufre violencia, y los violentos lo arrebatan» (RVR, 1960). El que vaya a prevalecer con Dios debe ocuparse de que toda su fuerza caiga sobre sus oraciones.
  • gotowomcompartió una citahace 7 años
    Dios

    Cuando contemplo tus cielos, obra de tus dedos, la luna y las estrellas que allí fijaste, me pregunto: «¿Qué es el hombre, para que en él pienses? ¿Qué es el ser humano, para que lo tomes en cuenta?»
    SALMOS 8:3-4
    Alza tus ojos a los cielos y cuenta las estrellas. Escucha al astrónomo cuando te dice que esas pequeñas motas de luz son mundos poderosos, algunos de ellos infinitamente superiores a este mundo nuestro y que en el cielo resplandecen millones y millones de mundos así y que quizá todos estos millones que podemos ver son solo una pequeña esquina, una pequeña duna de los mundos que Dios ha hecho, mientras que a lo largo del espacio ilimitado pudieran haber leguas de mundos, si se me permite la expresión, tan innumerables como la arena que circunda la costa de la profundidad. Y ahora, un hombre en un mundo ¡qué pequeño! Un
  • b7923137274compartió una citahace 7 años
    A veces nos preguntamos por qué la iglesia de Dios crece tan lentamente, pero yo no me lo pregunto cuando recuerdo cuán escasa consagración a Cristo hay en la iglesia de Dios.
  • b7923137274compartió una citahace 7 años
    La verdadera manera de vivir un cristiano en este mundo es estar siempre como quisiera estar si Cristo viniera en ese momento y hay una manera para vivir ese estilo: sencillamente depender de la sangre y la justicia de Jesucristo y luego ir a servirle cada día, por amor a él, diciéndole: «Señor, muéstrame lo que quieres que haga».
  • b7923137274compartió una citahace 7 años
    Si se leyera la Biblia y se orara sobre ella, muchos errores morirían una muerte rápida y otros quedarían seriamente lisiados.
fb2epub
Arrastra y suelta tus archivos (no más de 5 por vez)