Melina Furman

  • Benjamin Melgarejo Reicheltcompartió una citahace 8 meses
    ¿Cómo ayudamos a que los niños desarrollen una mentalidad de crecimiento? Las investigaciones nos dan algunas pistas claves. En uno de los trabajos de Dweck, los chicos tenían que jugar a un juego de matemática en dos versiones. La mitad de los estudiantes jugaba a una versión del juego que premiaba el esfuerzo y en la que recibían puntos por intentarlo. La otra mitad jugaba a una versión que premiaba los resultados correctos. ¿Y qué pasó? Los chicos que jugaron al juego que premiaba el esfuerzo lograron resolver mejor los desafíos matemáticos que los otros, porque pudieron sostener la atención y el deseo de jugar por más tiempo y así desplegaron mayor variedad de estrategias.
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    Aquí, entonces, la primera pista que nos ayuda en nuestro rol de padres. Construir una mentalidad de crecimiento en los chicos implica premiar el esfuerzo, más que el logro. Se trata de valorar la práctica, los intentos que hicieron y cuánto trabajaron, además de lo que consiguieron.
  • Benjamin Melgarejo Reicheltcompartió una citahace 8 meses
    Lo que nos muestran las investigaciones es que elogiar la inteligencia o el talento de los chicos genera todo lo contrario. Los chicos empiezan a no querer defraudarnos a nosotros o a su propia imagen de sí mismos. Y dejan de elegir actividades que los desafíen o les resulten difíciles, porque quieren ir a lo seguro.
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    También ayuda ser específicos con los elogios. En lugar de decir “Qué bien jugaste al fútbol hoy”, podríamos decirles “Estuviste genial cuando lograste llevar la pelota de un lado a otro de la cancha sin perderla” o “Me encantó cuando le pasaste la pelota a tu compañero y después metieron el gol”.
  • Benjamin Melgarejo Reicheltcompartió una citahace 8 meses
    Hoy sabemos que para despertar, y sobre todo para sostener, el deseo de aprender, es fundamental generar el hábito del aprendizaje profundo. ¿Qué quiere decir eso? Es ir metiéndose de cabeza en un tema, desentrañarlo, entender qué es lo importante, conectarlo con otros temas y con nuestra propia vida, y mirarlo desde muchos puntos de vista. Y digo que la profundidad ayuda a sostener el amor por aprender porque cuando conocemos algo bien, cuando nos vamos haciendo expertos en algo, ganamos confianza en nuestra propia capacidad como aprendices. Y esa confianza nos ayuda a seguir adelante.
  • Benjamin Melgarejo Reicheltcompartió una citahace 8 meses
    La autoeficacia está muy relacionada con la mentalidad de crecimiento que observaba Carol Dweck en las investigaciones de las que hablamos en el capítulo anterior. Sentirnos autoeficaces ayuda a que podamos comprometernos con el aprendizaje, incluso en instancias en que la cosa se pone más difícil. Esto es muy importante, porque aprender implica siempre poder sostener aquellos momentos de frustración o trabajo duro que todo proceso trae consigo. Y aquí no se trata de sentir que hacemos todo bien cuando no es cierto, claro que no. Por el contrario, se trata de construir la sensación de que podemos lograrlo, de que estamos recorriendo el camino, y de que somos capaces de llegar a buen puerto.
  • Benjamin Melgarejo Reicheltcompartió una citahace 8 meses
    En estos tiempos en los que casi todos los adultos estamos conectados a toda hora del día, muchas veces estamos distraídos cuando los chicos nos hablan. Los escuchamos mirando el teléfono y mientras hacemos otras cosas en simultáneo. Y esto seguramente tiene efectos en la construcción que nuestros hijos hacen tanto sobre nosotros como sobre sí mismos y su propia autoestima.
  • Benjamin Melgarejo Reicheltcompartió una citahace 8 meses
    También se vio que las percepciones de los chicos sobre cuán interesados están sus padres en su educación y en sus vidas se relacionan de forma positiva con sus propias actitudes hacia la escuela y su motivación para estudiar.
  • Benjamin Melgarejo Reicheltcompartió una citahace 8 meses
    Pero hay algo más que nos activa el circuito de recompensa: la novedad. Cuando tenemos enfrente algo novedoso, o que nos causa curiosidad, nuestro circuito de recompensa se enciende, y tenemos el deseo irresistible de saber qué es. Por eso es tan difícil, por ejemplo, no mirar los mensajes del teléfono cuando una lucecita o un sonido nos avisa que nos mandaron algo nuevo.
  • Benjamin Melgarejo Reicheltcompartió una citahace 8 meses
    Creo que el primer secreto para que la tecnología sea un vehículo para el aprendizaje y no genere comportamientos adictivos está en ofrecerles propuestas tecnológicas en las que sean protagonistas y no sólo consumidores. Como me decía hace poco el fundador de un centro de tecnología para niños, “No es lo mismo jugar un videojuego que crearlo”.
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