Tenía clasificados protozoos que, por lo general, vivían en monedas y en pasamanos de buses; unos más, terriblemente específicos, vivían entre páginas de libros viejos y sólo se alimentaban —según su teoría— con restos de tinta de la letra “o”.
Yeraymi Loretocompartió una citahace 10 meses
besos y el sexo eran tan banales como un par de monedas o un billete de mil pesos: eran sólo limosna afectiva.
Gioryeth Artunduaga Rojascompartió una citahace 9 meses