1908 d. C.
El químico Kikunae Ikeda, de la Universidad de Tokio, aísla de algas marinas el aminoácido potenciador de sabor monosodio glutamato, que da un sabor cárnico a las dietas vegetales. Él llama a esta sal blanca Ajinomoto, que significa ‘la esencia del sabor’. La compañía será líder en la venta de monosodio glutamato y el nombre Ajinomoto se constituirá en un genérico para el glutamato. En China se le llamará Wei-chín o Ve-tsin