Mercedes de la Garza Camino

  • Anacompartió una citael mes pasado
    Durante el siglo III d.C. se inicia una época de florecimiento en todos los órdenes, llamada por ello periodo Clásico, que culmina en el siglo IX. En primer lugar se produjo un gran desarrollo de la agricultura con sistemas de riego y cultivos comerciales, como el del cacao y el algodón. Se incrementaron las relaciones con otros pueblos de Mesoamérica como los teotihuacanos, creadores de la primera gran ciudad del Altiplano Central de México. Hubo un aumento en la tecnología y se consolidó una organización política estrechamente vinculada con la religión, que ya para este momento presenta un alto grado de complejidad.
  • Anacompartió una citael mes pasado
    Al mismo tiempo se desplegó, sobre todo en la región central, la profunda creatividad espiritual que ha dado a los mayas un lugar excepcional en la historia de la humanidad: la escritura se desarrolla hasta convertirse en la más avanzada de América, despuntan la matemática, la astronomía y la cronología, conocimientos que podemos llamar “científicos”, desde la idea occidental de ciencia, pero que para ellos fueron una forma de conocer y manejar las energías sagradas emanadas principalmente de los astros, los cuales fueron concebidos como seres divinos o como epifanías de lo sagrado; pero esos conocimientos también constituyeron una forma de consolidar el derecho de los linajes ilustres a gobernar y mantener su dominio sobre el pueblo.
  • Anacompartió una citael mes pasado
    A finales del siglo XVII, en 1695, fue exterminada por los españoles la etnia lacandona en la selva del mismo nombre, después de un proceso largo y dramático iniciado en 1530; se trató de un etnocidio, como afirma Jan de Vos, ya que la mayoría de los llamados lacandones que habitan hoy esa región no desciende de aquéllos, sino que proviene de un grupo de mayas yucatecos que se internó posteriormente en la selva huyendo del dominio español.
  • Anacompartió una citael mes pasado
    Dos años después, en 1697, cae el que al parecer fue el último baluarte indígena de la Mesoamérica prehispánica: la ciudad de Ta Itzá, llamada por los españoles Tayasal, que era gobernada por la familia Canek del linaje de los itzáes, quienes habían huido a esas regiones desde Chichén Itzá. Ta Itzá se ubicaba en las márgenes del lago Petén Itzá en Guatemala, y conservaba las creencias y costumbres prehispánicas, en impactante contraste con la Nueva España, donde en ese momento despuntaba el pensamiento de una nueva nación, con el brillo de sor Juana Inés de la Cruz y Juan Ruiz de Alarcón.
  • Anacompartió una citael mes pasado
    Ernst Förstemann (1822-1906), que logró descifrar el sistema aritmético y el calendario, así como la forma de leer los textos.
fb2epub
Arrastra y suelta tus archivos (no más de 5 por vez)