Para muchos, la precisión con la que el universo explotó proporciona una evidencia aún más persuasiva para la existencia de Dios.
Esta evidencia, técnicamente conocida como el argumento teleológico, deriva su nombre de la palabra griega telos, que significa “diseño”. El argumento teleológico es el siguiente:
1. Cada diseño tiene un diseñador.
2. El universo tiene un diseño altamente complejo.
3. Por lo tanto, el universo tiene un Diseñador