Sarah Waters

Ronda nocturna

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  • Azafran Hernándezcompartió una citahace 5 años
    Es Vivien? ¡Viv, ven a verme! No puedo levantarme.
    –Está clavado en el suelo –dijo Mundy, sonriendo.
    –¡Ven a ver! –gritó de nuevo Duncan.
    Ella empujó la puerta de la sala y entró. Duncan estaba tumbado de bruces en la alfombra delante de la chimenea, con un libro abierto, y sobre la región lumbar tenía sentada la gatita atigrada de Mundy. La gata flexionaba sus patas delanteras como si estuviera amasando algo, y estiraba y retraía los dedos y las zarpas, ronroneando de gusto. Al divisar a Viv, entornó los ojos y se movió más aprisa. Duncan se rió.
    –¿Qué te parece? Me está dando un masaje.
  • Azafran Hernándezcompartió una citahace 5 años
    Viv asintió, pero esta vez con cierta vaguedad. Fumó su cigarro y se quedaron varios minutos sentadas en silencio.
    Ya ha caído el telón, pensó Helen, porque estaba acostumbrada a que Viv hiciera aquello: contar pequeñas confidencias, referir recuerdos y después retraerse de golpe, como si se hubiera ido de la lengua.
  • Azafran Hernándezcompartió una citahace 5 años
    Las palabras prosiguieron, como una lluvia de golpes delicados de un amante severo
  • Azafran Hernándezcompartió una citahace 5 años
    Quizá una aspirina.
    Leonard encogió la barbilla y miró a Mundy como diciendo: Vaya, vaya.
    –Pero sabes muy bien, ¿verdad?, cómo es una persona que utiliza remedios falsos y un tratamiento espiritual al mismo tiempo. Es como si la tironeasen dos amos; no avanza en ninguna dirección. Lo sabes, ¿verdad?
  • Lorena Alejandra Balzaretticompartió una citahace 6 años
    Qué sitios tan curiosos, pienso siempre. Sitios tan instructivos... La próxima vez que vaya al cine, señorita Langrish, debe probar una cosa. Se trata de girar la cabeza y mirar por encima del hombro. ¿Qué encontrará? Muchísimas caras, todas alumbradas por la luz inquieta y titilante de las cosas efímeras. Ojos fijos, abiertos como platos, sobrecogidos, aterrados, codiciosos. Ya ve, así es el espíritu no evolucionado, subyugado por los sentidos materiales; por ficciones y sueños...
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