Esclava del Vampiro

Alice era todo lo que un hombre, mortal o no, podía desear. Hermosa, carismática, inteligente y el vivo reflejo de un ángel. Su trabajo era simple; convencer. Con un padre mafioso y ausente y poco que perder, su vida consistía en hablar con empresas, ONGs e intentar ayudar a los más desfavorecidos… a costa de granjearse numerosos enemigos. Sin embargo, todo cambió cuando se encontró con Arthur, un hombre con zafiros por ojos y mármol por piel, enfundado en su traje azul y sus gemelos con forma de lágrima. Aquel hombre emanaba poder de forma que ninguno antes había hecho antes. Sin importar a cuantos ejecutivos, directores y millonarios hubiera conocido antes, Arthur tenía algo que todos los demás carecían. Calma. La calma de alguien que no teme a los hombres, a la muerte, o al poder, desde su voz grave y fría como el hielo hasta la paz y armonía de sus gestos. Tras una romántica y casta cena para hablar de donaciones con aquel hombre, entre sudores, Alice despertó en su hotel, con el corazón a punto de salírsele del pecho, tras un sueño erótico con Arthur por protagonista. Sueños que se repitieron, noche tras noche, hasta que una noche no despertó tras una fantasía, sino dos sicarios muertos en su habitación y sonidos de lucha. Lo último que pudo ver eran dos ojos como zafiros y una voz grave como la muerte y fría como el hielo decir “Duerme”. Al despertar, Alice se encontraba en el ático de un rascacielos, encerrada con un hombre que, enfundado en un traje azul y dos gemelos con forma de lágrima, juraba protegerla del mundo hasta que el mundo tuviese que protegerse de ella. Y así comenzó un largo, viejo y obsesivo camino, recorrido por miles de humanos antes, incluyendo Arthur. Un camino de servidumbre, adoración y obsesión, hasta, que efectivamente, Alice se convirtió en algo más que una esclava de sangre; una reina que podía hacer, por primera vez, algo más que hablar con gente poderosa. Podía mecer los cimientos del mundo. Advertencia: Una novela carga de pasión, erótica explícita y un romance tan profundo como obsesivo, con elementos paranormales del mundo de la noche y los vampiros, y un trasfondo de drama, novela negra y thriller emocional. Dirigida a un público adulto y maduro.