Libros
Ngugi wa Thiong'o

Desplazar el centro

Romper las fronteras mentales y desplazar los centros de poder para redistribuirlo y descomponer la hegemonía cultural.
Durante los últimos cuatrocientos años, las culturas del mundo han sido dominadas por un conjunto de estados occidentales, que han llegado a verse a sí mismos como el centro del universo, un centro desde el cual han controlado, además del poder económico y político, el poder cultural. Uno de los efectos más devastadores de este dominio ha sido la aniquilación y la represión de las culturas africanas. Con la cultura al servicio del pueblo debilitada y dividida, la lucha del campesinado y del proletariado por los derechos humanos fundamentales y por la redistribución de la riqueza es más díficil.
En este libro, wa Thiong'o se preocupa de “desplazar” este centro en dos sentidos para liberar no solamente las culturas africanas, sino las de todo el mundo: internacionalmente hay que desplazarlo desde Occidente hacia el resto de esferas culturales, y nacionalmente hay que apartarlo de las minorías de poder y llevarlo hacia el auténtico centro creativo, las clases trabajadoras, en condiciones de igualdad racial, religiosa y de género.
281 páginas impresas
Propietario de los derechos de autor
Bookwire
Publicación original
2018
Año de publicación
2018
¿Ya lo leíste? ¿Qué te pareció?
👍👎

Opiniones

  • Lauracompartió su opiniónhace 3 años
    👍Me gustó
    🔮Profundo
    💡He aprendido mucho

    Una excelente recopilación de conferencias y charlas de Ngugi, este es el segundo libro que leo del autor keniano y me sigue sosprendiendo con sus memorias. Con este libro aprendí mucho más sobre la tortuosa travesía de la literatura africana y el desventurado neocolonialismo que tantos embates u estigmas ha generado en la sociedad de ese continente, un reflejo de lo que también sucede en Latinoamerica.

Citas

  • mecalcagcompartió una citahace 2 años
    Así como, en su momento, las luchas de Zimbabue, Angola y Mozambique hicieron que la revolución africana avanzara respecto a donde la habían dejado el FLN y el Ejército Keniano de la Tierra y la Libertad en los años cincuenta, de igual modo el futuro éxito de las luchas populares en Namibia y Sudáfrica impulsará al continente entero hacia una nueva fase
  • mecalcagcompartió una citahace 2 años
    O pueden seguir los dictados de su inspiración y arriesgarse a ser encarcelados o exiliados. Escribir y arriesgarse al castigo. Evitar el castigo y dejar de ser escritor. Ésa es la disyuntiva de los escritores en un Estado neocolonial. Y no es el único dilema que afrontan… ¿Para quién escriben? ¿Para el pueblo? ¿Si es así, en qué lengua? Es un hecho que los escritores africanos que aparecieron tras la Segunda Guerra Mundial optaron casi siempre por lenguas europeas. Todos los escritores africanos importantes de esta generación escribieron en inglés, francés o portugués. Y, sin embargo, por lo general los campesinos y la gran mayoría de trabajadores, es decir, las masas, tienen sus propias lenguas. ¿No está perpetuando el escritor, en el ámbito de la práctica cultural, el mismo neocolonialismo que condena en el ámbito de la práctica económica y política? Para quién escribe el escritor es una cuestión que no ha sido resuelta satisfactoriamente por los escritores de los países neocoloniales. Para el escritor africano, la elección de la lengua determina la elección de la audiencia.
    Y, más allá de la lengua por la que el escritor haya optado, ¿cuáles son sus temas? ¿Para él, la realidad puede cambiarse o es inmutable? Presentar una realidad estática, o atrapada en un bucle inalterable, es sucumbir a la desesperanza. Pero presentar una realidad en transformación revolucionaria, y hacerlo desde la perspectiva del agente de ese cambio —el pueblo—, puede significar ser perseguido por el Estado. Al fin y al cabo, los escritores que presentan realidades mutables están diciendo a los que ostentan el poder que también su momento, tarde o temprano, quedará atrás.
    Creo que lo que he contado es suficiente para mostrar que la vida de los escritores en esta tercera etapa, la de los años setenta, no era en absoluto sencilla, sobre todo para aquéllos que deseaban estar cerca del pueblo.
    La lucha entre las fuerzas sociales y democráticas, que abogan por la vida y el progreso humano, y las fuerzas imperialistas que abogan por la opresión y la muerte sigue vigente en el mundo actual, y seguirá siendo así en el futuro, cada vez con mayor intensidad si cabe
  • mecalcagcompartió una citahace 2 años
    O pueden seguir los dictados de su inspiración y arriesgarse a ser encarcelados o exiliados. Escribir y arriesgarse al castigo. Evitar el castigo y dejar de ser escritor. Ésa es la disyuntiva de los escritores en un Estado neocolonial. Y no es el único dilema que afrontan… ¿Para quién escriben? ¿Para el pueblo? ¿Si es así, en qué lengua?

En las estanterías

fb2epub
Arrastra y suelta tus archivos (no más de 5 por vez)