Libros
Timothy Keller

El profeta pródigo

Un profeta enfadado. Un enemigo temido y detestable. Una tormenta devastadora. Y el sorprendente mensaje de un Dios misericordioso a su pueblo.

La mayoría de las personas, incluso aquellas que no son religiosas, conocen la historia de Jonás: un profeta rebelde que desafía a Dios y que es tragado por un gran pez. Lo que la gente no conoce tan bien es la segunda parte de la historia: lo que le ocurre a Jonás tras salir del vientre del animal. Sin embargo, es en esta parte donde se encuentra una de las lecciones más poderosas e importantes de la Biblia.

Esta famosa historia muestra cómo, si comprendiésemos la misericordia de Dios, nos llevaría a lugares donde preferiríamos no ir, a personas por las que preferiríamos no preocuparnos y, en última instancia, a los propósitos más profundos de Dios. En un momento de creciente división, «El profeta pródigo» nos muestra el amor de Dios en medio de las personas y cómo los cristianos deben escuchar el llamado de Dios incluso cuando los lleva a lugares incómodos.
215 páginas impresas
Propietario de los derechos de autor
Bookwire
Publicación original
2021
Año de publicación
2021
¿Ya lo leíste? ¿Qué te pareció?
👍👎

Opiniones

  • Sandra Chávezcompartió su opiniónhace 2 años
    👍Me gustó
    🔮Profundo
    💡He aprendido mucho
    🎯Justo en el blanco

    De manera sencilla el autor te lleva a reflexionar sobre Jonás. Había varios puntos que nunca había considerado y eso enriqueció mi perspectiva acerca del libro.
    Recomendado siempre.

  • b2854537937compartió su opiniónhace 2 años
    👍Me gustó

Citas

  • Sandra Chávezcompartió una citahace 2 años
    Los ministros y líderes cristianos, entonces, deben instruir y alentar a los creyentes a que sean políticamente activos, buscando ser “sal” y “luz” (Mateo 5:13-16), usando la sabiduría bíblica para favorecer el bien común. Pero, como representación de la iglesia institucional, no deberían promover ninguna agenda política partidista.
  • Sandra Chávezcompartió una citahace 2 años
    Esto significa que los pastores y otros líderes de la iglesia deben tener mucho cuidado al referirse en público a temas políticos actuales, porque incluso si tratan de hacerlo como “ciudadanos privados”, inevitablemente se les considerará como personas que hablan de forma oficial en nombre de la iglesia institucional al afirmar que su punto de vista particular es la postura política bíblica o cristiana.
  • Sandra Chávezcompartió una citahace 2 años
    la iglesia debe producir cristianos individuales, “la iglesia dispersa”, que se involucren en acciones políticas; pero la iglesia institucional “reunida” y sus líderes no deben estar alineados con partidos y líderes políticos concretos.

En las estanterías

fb2epub
Arrastra y suelta tus archivos (no más de 5 por vez)