El sueño de toda célula

Es un libro precioso. Me hizo pensar en la importancia de la naturaleza y la mezcla que somos con todos los seres vivos. Y la importancia de vivir. De descubrirnos y de apreciar cada célula de nuestro cuerpo.

Cómo todo se borda para crear poesía. Me encantó. 💓
Lo disfruté y sentí bastante.

Lectura de sueños interespecies. Si les late la ecología, el pensar el habitar, conocer más de las plantas y los animales no humanos, la crítica al extractivismo: este libro es muy recomendable.

Un libro lleno de sensibilidad, de verde, de vida, de sueños.

Me pareció muy bonito. Nunca había leído poesía que tuviera una temática científica (biológica, en este caso) y me pareció excelente. El mismo libro se siente ambientando en sus páginas aunque definitivamente volveré a leerlo, está vez en voz alta, para comprender mejor algunas cosillas que me fueron difíciles de entender.

Me habían dicho que este libro era una hermosura, yo incrédula pues lo tenía pendiente, pero vengo a confirmarles que sí es una hermosura.

Son poemas que nos invitan a repensar otras formas de cuidado, de ser, de estar ... nos invitan a repensar nuestra postura ante el medio ambiente y los seres que en él habitamos.

Esta autora nos invita, como ella dice ... a reorganizar nuestra vida y ser más como las plantas y gastar nuestras energías en aspectos valiosos como crecer en compañía. Ojalá lo lean, no se van a arrepentir.

Empecé a leer por pura casualidad, y curiosidad más que nada, y me encontré con el libro que más he disfrutado en el año.

La poesía no es lo mío

¡A veces detenerse es otra forma de fluir! 🍃💚

Los dos puntos, el verdor terrible de las frases suspendidas, la ternura de la maestra Olmedo. Aun así, todo me sigue pareciendo indescifrable y para leer en diagonal; me daré un descanso de la poesía.
Pero la paz que obtuve leyendo esto nadie ne lo quita. 🌿

Un hermoso y doloroso poemario sobre el mundo que habitamos y el que podríamos habitar si estuviéramos dispuestos a escuchar otras lenguas, las de las células, las de los lobos.

A veces detener es una forma de fluir