bookmate game
Libros
Javier Montes

Luz del Fuego

  • Guillermo Ladd Huarachicompartió una citahace 4 años
    –¡Majestad, no soy la Novia del Brasil! ¡Yo soy la Novia Pistolera!
  • Guillermo Ladd Huarachicompartió una citahace 4 años
    Y justo entonces la sonrisa de la Novia del Brasil se vuelve diabólica y brilla en sus ojos una chispa luciferina. Y se congela la sonrisa del Rey Momo y la de los seis mil rostros de los invitados cuando Luz del Fuego, sonriendo más que nunca, le deja con la mano en el aire y la palabra en la boca y desenfunda rapidísima, como una cobra que de pronto da un tijeretazo y abre las fauces y muestra los colmillos, dos pistolones blancos de las faltriqueras disimuladas a la altura de sus caderas ceñidísimas. La orquesta deja en el aire la primera nota del vals, que cristaliza y se suspende glacial sobre el patio abarrotado y los palcos repletos y los decorados de pacotilla. Y sobre ella se oye retumbar la voz de Luz del Fuego.
  • Guillermo Ladd Huarachicompartió una citahace 4 años
    Antes de que llegue al pie de la escalera, lo que está claro es que ya le ha ganado la admisión al baile y la aprobación de los notables: bien está lo que bien acaba. Es Carnaval, todo se perdona. Magnánimos, están dispuestos a admitir en su seno a la oveja descarriada que al fin se ha plegado a la medida exacta de desacato y broma que en una noche así se acepta y en el fondo se exige (porque refuerza, como el Carnaval mismo, las normas que finge transgredir)
  • Guillermo Ladd Huarachicompartió una citahace 4 años
    Hasta esta noche: es difícil deslindar el alivio de la desilusión en el grito de sorpresa de los miles que la ven llegar cuando Luz del Fuego ha bajado de su coche vestida de novia. El traje es irreverente y ajustadísimo, revela más de lo que cubre, cierto: pero es un traje, al fin y al cabo. Y se ajusta a las leyes no escritas y a la etiqueta de los disfraces del baile tanto o más que a las curvas de su cuerpo menudo pero generoso: tiene el toque justo, esta vez, de picardía y de humor. Insinúa sin mostrar
  • Guillermo Ladd Huarachicompartió una citahace 4 años
    La aparición, en eso se equivocaron los presentes, no fue irrepetible. Desde entonces, por cinco veces sin faltar una, en cinco Lunes de Carnaval consecutivos, Luz del Fuego ha repetido lo que es ya un ritual anticipado por todo Río y retransmitido al Brasil entero. Por cinco veces ha intentado imponer su desnudez como el disfraz más opulento ese día, mientras su fama crece de año en año durante los otros 364: abarrota patios de butacas, llena portadas de revistas, asegura taquillas con el cartel de completo y reventas astronómicas y tiradas vendidas a los pocos minutos en los quioscos de todo el país
  • Guillermo Ladd Huarachicompartió una citahace 4 años
    Ha sido Yemanjá, Diosa de las Aguas (con el cuerpo pintado de verde), Reina de Saba (con el cuerpo teñido de negro), Sol de Medianoche (con el cuerpo brillante de oro) y Selene, Señora de la Luna (con el cuerpo bruñido de plata). No siempre ha llegado con sus serpientes, como si no quisiera abusar del golpe teatral de la primera vez. Pero siempre, siempre, se ha presentado sin acompañante y ha recorrido sola el pasillo de ida y vuelta frente a la escalinata del teatro: algo tan atrevido casi como su desnudez
  • Guillermo Ladd Huarachicompartió una citahace 4 años
    No es que fuera ni más guapa ni más fea ni más alta ni más baja que su séquito o que las demás mujeres, sino que era infinitamente más turbadora, más inaudita
  • Guillermo Ladd Huarachicompartió una citahace 4 años
    sexo, más negro aún que su melena.
    Cubierto solo por ese aceite y por la gigantesca boa también reluciente, marrón y negra, inequívocamente viva y desdeñosa, llevada con toda naturalidad, como la más lujosa estola de pieles o chal de pedrería, por aquella mujer
  • Guillermo Ladd Huarachicompartió una citahace 4 años
    hacia atrás para no ocultar ni un solo centímetro de su cuerpo totalmente desnudo, cubierto solo por un aceite que hacía relucir como si fuera bronce su piel morena y brillar con destellos oscuros su sexo, más negro aún que su melena
  • Guillermo Ladd Huarachicompartió una citahace 4 años
    abrió lentamente para mostrarla a ella, Luz del Fuego, con su larguísima melena negra peinada
fb2epub
Arrastra y suelta tus archivos (no más de 5 por vez)