—Es la ecuación más romántica que existe —se explica—. ¿Y sabes por qué? Porque describe el fenómeno del enlazamiento cuántico, que consiste en lo siguiente: si dos sistemas interactúan durante un cierto periodo de tiempo y luego se separan, podemos describirlos como «sistemas independientes» que, de alguna manera, siguen conectados como uno solo. Siguen influyendo el uno sobre el otro, a pesar de los kilómetros de distancia. No importa cuán separados estén, porque la conexión entre ellos sigue y seguirá siendo instantánea.
»La anoté pensando en ti justo después de que me dijeras que habías quedado con otro hombre —continúa—. Mi idea era mandártela esa noche, pero no estaba preparado para decirte que estaría enamorado de ti incluso cuando dejaras de venir a verme. Sobre todo porque los científicos necesitamos verificar nuestras hipótesis, y no ha sido hasta ahora que me he dado cuenta de que mi intuición no falló: incluso sin verte durante este tiempo, te he sentido a mi lado. En la casa. Aunque no te oyera a través del balcón. Estoy enlazado a ti cuántica y emocionalmente.