En los primeros tiempos todos los seres humanos eran esquimales. Sucedió entonces que un perro tomó a una muchacha por esposa y de la prole que tuvieron es de donde descienden los hombres blancos.
La muchacha, sin embargo, avergonzada de sus hijos, los abandonó en el mar subidos a la suela de una bota. Así fue como viajaron a otros países y llegaron a ser padres de todos los hombres blancos.
Natalia Ligacompartió una citael año pasado
Veréis, cuando alguien muere y sus parientes lo lloran demasiado, no recupera las fuerzas y debe yacer así hasta que dejan de llorarlo.
Natalia Ligacompartió una citael año pasado
Solo aquellos sepultados en tierra firme suben al cielo; los arrojados al mar descienden al inframundo, que también es un lugar muy agradable.
Natalia Ligacompartió una citael año pasado
—¡Qué importa no tener día si así tampoco tenemos muerte! —decía una; se ve que eso de morirse le daba miedo.
—No —replicó la otra—, ¡queremos ambas cosas, la luz y la muerte!
Jesús M. Gallegos De S.compartió una citael año pasado
En aquellos tiempos el agua ardía.
Jesús M. Gallegos De S.compartió una citael año pasado
Hace mucho, mucho tiempo, cuando aún no existía la Tierra, cayó de lo alto; tierra, montañas y piedras, de arriba, del cielo; así apareció la Tierra.
Jesús M. Gallegos De S.compartió una citael año pasado
En la vejez no hay mentiras.
Jesús M. Gallegos De S.compartió una citahace 2 años
Pero los hombres se multiplicaron; cada vez había más. No conocían la muerte hace mucho, mucho tiempo, y vivían muchos años; tantos que al final no podían andar, se quedaban ciegos y tenían que tumbarse.
Jesús M. Gallegos De S.compartió una citahace 2 años
Pero los hombres se multiplicaron; cada vez había más. No conocían la muerte hace mucho, mucho tiempo, y vivían muchos años; tantos que al final no podían andar, se quedaban ciegos y tenían que tumbarse
Jesús M. Gallegos De S.compartió una citahace 2 años
Como los hombres ya tenían luz, podían salir a cazar y no tenían que seguir alimentándose de la tierra. Y con la muerte llegaron el sol, la luna y las estrellas. Pues cuando alguien muere, sube al cielo y empieza a brillar