bookmate game
Gratis
Miguel de Unamuno

Niebla

  • Alejandro Roblescompartió una citahace 7 años
    Las mujeres saben siempre cuándo se las mira, aun sin verlas, y cuándo se las ve sin mirarlas.
  • Farid Peñacompartió una citahace 4 años
    «Es una desgracia esto de tener que servirse uno de las cosas –pensó Augusto–; tener que usarlas, el use estropea y hasta destruye toda belleza. La función más noble de los objetos es la de ser contemplados. ¡Qué bella es una naranja antes de comida! Esto cambiará en el cielo cuando todo nuestro oficio se reduzca, o más bien se ensanche a contemplar a Dios y todas las cosas en Él. Aquí, en esta pobre vida, no nos cuidamos sino de servimos de Dios; pretendemos abrirlo, como a un paraguas, para que nos proteja de toda suerte de males.»
  • Giantzé Juradocompartió una citahace 6 años
    Tú estabas enamorado, sin saberlo por supuesto, de la mujer, del abstracto, no de esta ni de aquella
  • Enyha Gonzálezcompartió una citahace 3 años
    Y te miró, ¿no es eso?, ¿y creíste en Dios?
    –No, no es que me miró, es que me envolvió en su mirada; y no es que creí en Dios, sino que me creí un dios
  • Fabián Rodríguezcompartió una citahace 6 años
    Lo tengo ya escrito y es irrevocable; no puedes vivir más. No sé qué hacer ya de ti. Dios, cuando no sabe qué hacer de nosotros, nos mata.
  • Bianca Reáteguicompartió una citahace 6 años
    El hombre nace bueno, es naturalmente bueno; la sociedad le malea y pervierte…
  • Édgar Rodríguez Lópezcompartió una citahace 6 años
    La función más noble de los objetos es la de ser contemplados
  • Silvia Quiñoacompartió una citahace 18 días
    »¡Qué extraño animal es el hombre! ¡No está nunca en donde debe estar, que es a lo que está, y habla para mentir y se viste!
  • Silvia Quiñoacompartió una citahace 18 días
    Sólo parece gozar de alguna salud cuando duerme, y no siempre, porque a las veces hasta durmiendo habla! Y esto también nos ha contagiado. ¡Nos ha contagiado tantas cosas!
  • Silvia Quiñoacompartió una citahace 18 días
    En cuanto le ha puesto un nombre a algo, ya no ve este algo; no hace sino oír el nombre que le puso o verlo escrito. La lengua le sirve para mentir, inventar lo que no hay y confundirse. Y todo es en él pretextos para hablar con los demás o consigo mismo. ¡Y hasta nos ha contagiado a los perros!
fb2epub
Arrastra y suelta tus archivos (no más de 5 por vez)