Elena Ferrante

Crónicas del desamor

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  • Yamilet Bautistacompartió una citahace 5 años
    Cuando se entra en la casa de una persona muerta recientemente, es difícil creerla desierta. Las casas no conservan fantasmas, pero mantienen los efectos de los últimos gestos de vida.
  • Ana Saenzcompartió una citahace 5 meses
    Me abrazó, me mantuvo apretada contra él un rato sin decir una palabra. Estaba intentando comunicarme en silencio que, gracias a un don misterioso, él podía fortalecer el sentido e inventar un sentimiento de plenitud y felicidad. Fingí que lo creía, y por eso hicimos el amor largamente, en los días y en los meses por venir, sin prisa.
  • Ana Saenzcompartió una citahace 5 meses
    No le conté que quería quitármelo del todo del cuerpo, arrancarme las partes suyas que, por una especie de prejuicio positivo o por complicidad, nunca había podido ver. No le dije que quería zafarme del torbellino de su voz, de sus fórmulas verbales, de sus actitudes, de su visión del mundo. Deseaba ser yo misma, si es que eso seguía teniendo sentido. O por lo menos deseaba ver lo que quedaba de mí después de eliminarlo a él.
  • Ana Saenzcompartió una citahace 5 meses
    El futuro será siempre así, pensé. La vida de los vivos junto al olor húmedo de la tierra de los muertos, la atención junto a la desatención, los latidos de entusiasmo del corazón junto a las bruscas pérdidas de significado. Pero no será peor que el pasado.
  • Ana Saenzcompartió una citahace 5 meses
    Nunca más, pensé, nunca más. Ir de casa en casa visitando a alcahuetes que preparan bondadosamente citas ocasionales y te vigilan para ver si la cosa va bien, si él hace lo que tiene que hacer, si tú reaccionas como debes. Un espectáculo para parejas, un tema cómico cuando se van los invitados y en la mesa quedan las sobras.
  • Ana Saenzcompartió una citahace 5 meses
    Nunca más, pensé, nunca más. Ir de casa en casa visitando a alcahuetes que preparan bondadosamente citas ocasionales y te vigilan para ver si la cosa va bien, si él hace lo que tiene que hacer, si tú reaccionas como debes. Un espectáculo para parejas, un tema cómico cuando se van los invitados y en la mesa quedan las sobras. Di las gracias a Lea y a su marido y me fui muy pronto, de forma repentina, cuando los comensales iban a pasar al salón para tomar unas copas y charlar.
  • Ana Saenzcompartió una citahace 5 meses
    Al final, Lea me invitó a cenar al día siguiente y, aunque no me apetecía, acepté: es terrible el cerco del día vacío, cuando la noche te aprieta el cuello como una soga.
  • Ana Saenzcompartió una citahace 5 meses
    Al final, Lea me invitó a cenar al día siguiente y, aunque no me apetecía, acepté: es terrible el cerco del día vacío, cuando la noche te aprieta el cuello como una soga.
  • Ana Saenzcompartió una citahace 5 meses
    Qué insoportable es el cuerpo de un ser vivo que lucha con la muerte, y en un momento parece que gana, y al siguiente que pierde.
  • Ana Saenzcompartió una citahace 5 meses
    La niña se entretenía en quitarme el suelo en el que me apoyaba y sustituirlo por el suyo. Y eso era solo el principio: si le hacía caso, si me abandonaba a su voluntad, sabía que aquel día y aquel espacio del piso se abrirían a muchos tiempos diferentes, a un montón de lugares, y a personas y a cosas y a Olgas distintas que mostrarían, todas a la vez, los hechos reales, los sueños y las pesadillas, hasta crear un laberinto tan intrincado que nunca podría salir de él.
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