—No estoy seguro; pero sí, a veces querría volverme alcohólico. A veces querría estar borracho todo el tiempo; y lo haría, si no fuera porque sufro horriblemente las consecuencias al día siguiente. No se me notan, pero, Dios, me hacen sentir en el infierno.
—Bueno, supongo que mientras sufras estarás a salvo; por lo menos, eso es lo que me enseñó mi madre. ¿Quieres que nos sentemos aquí, o prefieres que encienda el hogar