Un mayor “espacio en la cúspide” no ha estado acompañado por una mayor igualdad de oportunidades para llegar ahí. Todo lo que ha sucedido es que, proporcionalmente, más de los nuevos trabajos de alto nivel han sido para los hijos de quienes ya tienen posiciones privilegiadas de clase. En resumen, el crecimiento de trabajos calificados de oficina ha incrementado las oportunidades de movilidad, en general, pero la distribución de esas oportunidades entre las clases ha permanecido igual.