Supuestos para un diálogo comienza con la palabra “supuestos” porque uno de sus propósitos es dejar ver algo de lo que yace oculto en las conversaciones sobre materia religiosa. No es infrecuente suponer que son temas para cuyo dominio basta con el conocimiento de otras materias. El propósito de estas aclaraciones es hacer los diálogos más fructíferos al entender mejor el contexto y alcance de las preguntas y afirmaciones entre los interlocutores. El contenido se presenta de modo esquematizado y claro, enviando a notas las referencias eruditas que fundamentan el texto, el que puede entonces también entenderse sin recurrir a ellas.
El libro comienza con una presentación panorámica de los modos en los que, por mucho tiempo, se ha planteado el tema de Dios. Luego trata sobre algunas formas de acceso a la realidad divina para posteriormente ilustrar algunos efectos que la relación con Dios tiene en distintos aspectos de la vida humana.
La última parte contiene una sección de Anexos con documentos ilustrativos de las materias explicadas en el texto. Siguiendo su fin práctico de preparación al diálogo, esta sección se inicia con un Vocabulario de Términos Difíciles. En él se explican los significados equívocos de algunas palabras empleadas en esta materia, los que, por ignorados, se suelen extender inadvertidamente del uso coloquial al ámbito religioso y producir malentendidos.