Kristen Ghodsee

Tanto la historia como los estudios empíricos recientes llevados a cabo en todo el mundo, desde Noruega hasta Japón, nos han enseñado que las formas de vida más comunitarias pueden reducir la soledad y el estrés para todo el mundo, además de ser menos perjudiciales para el medio ambiente. Entonces, ¿por qué vivimos como vivimos

capitalismo no regulado es malo para las mujeres y si adoptamos algunas ideas del socialismo la vida de estas mejorará.

Natalya Baranskaya en su magnífica novela Неделя как неделя (Una semana cualquiera).

El anticomunismo se niega a reconocer las importantes diferencias existentes entre las muy diversas sociedades que adoptaron el socialismo, así como sus logros en ciencia, educación, salud, cultura y deportes.

Los populistas de derechas intentarán convertir en chivos expiatorios a mujeres, personas de color y migrantes para desviar la culpa de las auténticas raíces de la injusticia económica: la elevada concentración de la riqueza en manos de cada vez menos gente.

En Alemania Occidental, las casadas no pudieron trabajar fuera de casa sin permiso marital hasta 1957. En Estados Unidos, las leyes que les prohibían firmar contratos sin el permiso de sus maridos perduraron hasta la década de 1960.

trabajo doméstico gratuito de las esposas subvencionaba los beneficios económicos de los empleadores, ya que las familias de sus empleados so

soportaban los costes de la reproducción de la futura población activa.

una economía global que se nutre del consumismo de masas a base de crédito, la burbuja terminará por reventar. En el horizonte acecha una crisis aguda de sobreproducción y escasez de consumo.

Braun aseguraba que, dado que los niños son beneficiosos para la sociedad en su conjunto, todos deberían contribuir al coste de su crianza. Los niños son los futuros soldados, trabajadores y contribuyentes. Son beneficiosos para todos, no solo para los padres y madres que los traen al mundo