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Monika Zgustova

  • Ana Saenzcompartió una citael año pasado
    “¿Qué crees que buscan tus enemigos? Verte frustrada, amargada, con la cabeza gacha. Si no quieres darles ninguna alegría a tus enemigos, mantén siempre la cabeza bien alta”.
  • Héctor Rojocompartió una citahace 2 años
    cuando me sumerjo en la lectura, estoy en otra parte, dentro del texto, me despierto sorprendido y reconozco con culpa que efectivamente vuelvo de un sueño, del más bello de los mundos, del corazón mismo de la verdad.
  • Héctor Rojocompartió una citahace 2 años
    Empecé a encontrar en mí la fuerza necesaria para afrontar la desgracia con sangre fría, para disimular mi emoción, empecé a darme cuenta de que la devastación y la catástrofe son un espectáculo de una belleza exquisita
  • Héctor Rojocompartió una citahace 2 años
    camino pensando en la melancolía de este mundo que no se acaba de construir jamás,
  • salvador emmanuel cabrera rodriguezcompartió una citahace 2 años
    Ando como una casa en llamas, como una granja ardiendo, la luz de la vida se alza del fuego y el fuego surge de la madera que muere, el hostil desconsuelo resta en el corazón de las cenizas
  • Ana Luelmocompartió una citahace 2 años
    un verdadero libro siempre indica algún camino nuevo que conduce más allá de sí mismo.
  • Adal Cortezcompartió una citael año pasado
    En las condiciones extremas en las que me tocó vivir fui testigo de cómo el hombre puede aniquilar a otro hombre con un solo gesto o cómo puede salvarle la vida únicamente mirándolo con bondad.
  • Adal Cortezcompartió una citael año pasado
    Uno aguanta mucho más de lo que cree: es una lección que la vida me dio ya en la infancia. Y si uno quiere sacar algo de esta vida, tiene que luchar por ello y sobreponerse a los obstáculos, esta es otra lección.
  • Adal Cortezcompartió una citael año pasado
    Jamás habíamos utilizado una con la otra apodos cariñosos, por ejemplo. Solo aprendí a exteriorizar la ternura con mis hijos y nietos. La educación que me dio mi madre fue autoritaria. Según le confesó a una tía mía, me había tenido para darle sentido a su vida, pues en un momento dado había perdido las ganas de vivir. Me tuvo para sobrevivir, diría yo. Ella, sin embargo, no me lo confesó nunca. Creo que no era plenamente consciente de lo compleja que resultaba la maternidad en solitario. De ahí su frecuente intransigencia para conmigo.
  • Ana Saenzcompartió una citael año pasado
    Y de hecho no me acostumbré nunca a lo que interpretaba como un comportamiento superficial: las personas se quejaban de muchas cosas que yo consideraba que no tenían importancia y vivían unas vidas que llenaban con frivolidades sin saber bien qué querían.
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