Una mujer que buscaba a su hijo volviéndose invisible como un gato cazando una paloma.
Yo la entendía, buscaba a alguien.
Empezaba a ver que los que buscan a una persona tienen algo, una marca cerca de los ojos, de la boca, la mezcla de dolor, de bronca, de fuerza, de espera, hecha cuerpo. Algo roto, en donde vive el que no vuelve.