es

Nigel Barley

  • Roxana Lezamacompartió una citahace 2 años
    se evaporan como el rocío bajo el sol africano
  • Roxana Lezamacompartió una citahace 2 años
    Es notorio que los sociólogos son avinagrados e izquierdistas proveedores de desatinos o perogrulladas
  • Roxana Lezamacompartió una citahace 2 años
    Pero los antropólogos se han situado a los pies de santos hindúes, han visto dioses extraños, presenciado ritos repugnantes y, haciendo gala de una audacia suprema, han ido a donde no había ido ningún hombre. Están, pues, rodeados de un halo de santidad y divina ociosidad
  • Roxana Lezamacompartió una citahace 2 años
    No son precisamente datos lo que le falta a la antropología, sino más bien algo inteligente que hacer con ellos
  • Roxana Lezamacompartió una citahace 2 años
    Como la vida monástica, la investigación erudita no persigue sino la perfección de la propia alma
  • Roxana Lezamacompartió una citahace 2 años
    Pero por fortuna mi ignorancia me resultó útil y comencé a aprender el arte de arrastrarse para recaudar fondos
  • Roxana Lezamacompartió una citahace 2 años
    La vida de los expatriados gira en torno a dos o tres cafés en los que pasan el rato hundidos en un profundo aburrimiento, contemplando cómo pasan los taxis y quitándose de encima a los vendedores de recuerdos, gentiles caballeros que han aprendido que los blancos están dispuestos a comprar cualquier cosa con tal que tenga un precio astronómico
  • Roxana Lezamacompartió una citahace 2 años
    Aunque sólo sea por eso, del antropólogo se puede decir que es un trabajador inocuo, pues el oficio tiene como uno de sus principios éticos interferir lo menos posible en lo que uno observa
  • Roxana Lezamacompartió una citahace 2 años
    El gran fraude reside en querer exportar al Tercer Mundo sistemas de pensamiento que el propio Occidente ha desechado hace tiempo
  • Mauricio Paredes Fernándezcompartió una citahace 10 meses
    En África existen dos modelos básicos de relaciones sexuales: en uno las mujeres son elementos debilitadores y peligrosos que le roban al hombre su virilidad esencial; en el otro, su sexualidad se nutre de ellas. Cuanto más fornica, más fuerte se vuelve.
fb2epub
Arrastra y suelta tus archivos (no más de 5 por vez)