es

León Tolstoi

  • Yola Najarcompartió una citael año pasado
    muy al contrario, nuestra opinión es que el mal no está en esta supuesta hidra revolucionaria, sino en el terco tradiciona­lismo que retarda el progreso...» .
  • Victoria Posternakcompartió una citahace 2 años
    Pues sí, él ha muerto, pero yo estoy vivo.»
  • Rafael Adrian Aguila Palacioscompartió una citahace 2 años
    - ¿Qué podemos decir de mí? - dijo, dilatando la boca con una sonrisa confiada y alegre -. ¿Qué soy yo? Un bastardo - y de pronto se ruborizó. Evidentemente, había hecho un esfuerzo extraordinario para decir esto -. Sin nombre, sin fortuna - añadió - y que, positivamente… - y dejó la frase sin terminar -. Por ahora soy un hombre libre y me considero feliz. Pero no sé por dónde empezar.
  • Ursulacompartió una citahace 3 meses
    escogía, pues, orientaciones ni modos de pensar, antes dejaba que las orientaciones y modos de pensar viniesen a su encuentro,
  • Alexis Delgadocompartió una citahace 3 meses
    «Sin duda hay en mí algo repugnante, algo que repele a la gente», pensaba Levin al salir de casa de los Scherbazky y di­rigirse a la de su hermano. «No sirvo para convivir en socie­dad. Dicen que esto es orgullo, pero no soy orgulloso. Si lo fuera, no me habría puesto en la situación que me he puesto.»
  • anahi andinocompartió una citahace 9 meses
    Todas las familias felices se parecen unas a otras; pero cada familia infeliz tiene un motivo especial para sentirse desgra­ciada.
  • Yidan Espinozacompartió una citael año pasado
    Cuando yo ya no exista, ¿qué habrá? No habrá nada. Entonces ¿dónde estaré cuando ya no exista? ¿Es esto morirse?
  • Yidan Espinozacompartió una citael año pasado
    Para las evacuaciones también se tomaron medidas especiales, cada una de las cuales era un tormento para él: el tormento de la inmundicia, la indignidad y el olor, así como el de saber que otra persona tenía que participar en ello.
  • Yidan Espinozacompartió una citael año pasado
    La salud, la fuerza y la vitalidad de otras personas ofendían a Ivan Ilich; únicamente la energía y la vitalidad de Gerasim no le mortificaban; al contrario, le servían de alivio.
  • Yidan Espinozacompartió una citael año pasado
    Últimamente, durante la soledad en que se hallaba, con la cara vuelta hacia el respaldo del sofá, esa soledad en medio de una ciudad populosa y de sus numerosos conocidos y familiares -soledad que no hubiera podido ser más completa en ninguna parte, ni en el fondo del mar ni en la tierra-, durante esa terrible soledad Ivan Ilich había vivido sólo en sus recuerdos del pasado.
fb2epub
Arrastra y suelta tus archivos (no más de 5 por vez)