Es verdad que estábamos algo hartos de tanta profundidad y tanta trascendencia predicadas por unas vanguardias que luego se apresuraban a hacer balance de caja, es innegable que, como escribió Jameson, queríamos vivir un tiempo en la superficie. Pero la superficie se ha vuelto resbaladiza; la literatura Prozac no ha logrado convencernos de que somos felices, ni siquiera de que estamos moderadamente satisfechos. We are not amused!Y a pesar de que en los telediarios el horror se disuelve entre noticias deportivas y desfiles de moda, no han conseguido que se nos quite la carne de gallina.