Este libro rescata algo extremadamente valioso en la era de los despliegues digitales donde las nuevas generaciones hacen mayor uso de medios tecnológicos que de los textos escritos: la cultura del relato y de la importancia de la narrativa escrita y oral en la trasmisión y enraizamiento de los valores. Vivimos en un mundo muy complejo, los educadores hoy tienen un enorme desafío. El tema de la formación y trasmisión de valores se torna una necesidad de primer orden. Hemos defendido unos valores que distan de los imperativos actuales de poder económico, éxito, individualismo, hedonismo y consumismo. La acción mediática de las grandes trasnacionales de la información irrumpe hoy especialmente en la subjetividad de niños, adolescentes y jóvenes capturándolos con propuestas de consumo material y cultural que por su atractivo y capacidad de encantamiento los cautiva y desvía de la verdadera riqueza y plenitud humana.