No le llames ya por su cumpleaños, mándale un mensaje. Llámale por su nombre mejor, aunque siempre hayas utilizado ese mote que ahora se ha quedado pequeño y cojo, como una palabra de una lengua hablada por una civilización antigua.
Anaïs Ornelascompartió una citahace 3 años
A la realidad no hay que darle ideas.
Angie Mcompartió una citahace 3 años
Era esa tristeza que me estrechaba, que me oprimía. Como un hueso de ciruela que se hubiera quedado atascado en la garganta, dejando el suficiente espacio para respirar pero asfixiándome lentamente.