Un hombre del reino

Usted es el elegido.

Es el elegido para cambiar su destino, su familia, su iglesia, su trabajo, su comunidad, su país y el mundo.

Se necesitarán hombres de valor que se pongan a la altura de las circunstancias en el reino donde han sido puestos.

Usted tiene un destino de grandeza. Existe algo para lo que usted fue creado. Hay algo que a usted lo apasiona, con lo que está dispuesto a comprometerse y que anhela encontrar. Es su destino.

Jesús dijo: «Todo el que crea en mí hará las mismas obras que yo he hecho y aún mayores».

No importa dónde esté empezando, de dónde venga, qué limitaciones tenga que afrontar o en qué contexto lo hayan criado: Dios puede

Dios puede engrandecerlo.

No obstante, como no miramos a largo plazo ni hacemos planes que vayan mucho más allá que lo que podemos ver, somos pocos los que damos los pequeños pasos necesarios para alcanzar la grandeza

Lo que tiene es lo único que necesita para cumplir con el destino que Dios le ha dado en este momento. Úselo.

no siempre llama a los preparados, siempre prepara a los que llama

Nunca mire solamente lo que tiene. Imagine en qué se puede transformar.