Jeannette Hyde

Pon a punto tu intestino

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  • martino0compartió una citahace 8 meses
    La manifestación de este fenómeno puede ser un ataque de estornudos, un empeoramiento del asma, picores, acné crónico o muchos tipos de inflamación crónica, desde la obesidad hasta la depresión
  • martino0compartió una citahace 8 meses
    problemas en la piel, como que salgan granos o que empeore un eccema
  • martino0compartió una citahace 8 meses
    través, según parece, del nervio vago que los conecta y de señales hormonales y neuronales.
  • martino0compartió una citahace 8 meses
    Antes se pensaba que los trastornos anímicos se debían exclusivamente a desequilibrios cerebrales, pero las últimas investigaciones parecen indicar que podrían estar vinculados a una falta de armonía en el sistema digestivo.
  • martino0compartió una citahace 8 meses
    La disbiosis se ha relacionado con estar bajo de ánimo o nervioso.
  • martino0compartió una citahace 8 meses
    se le inflama el abdomen y tiene más gases de lo habitual
  • martino0compartió una citahace 8 meses
    permeabilidad intestinal alterada, o disbiosis.
  • paolacompartió una citael año pasado
    dos piezas de fruta fresca al día.
  • paolacompartió una citael año pasado
    durante un mes para ayudar a que mejore tu sistema digestivo.
  • Patricia Fuentescompartió una citahace 2 años
    Calabacines a la boloñesa Fases a y b

    Para 8 personas

    Hace años que cocino esta receta; primero la hacía en una olla grande, que soltaba humo durante horas sobre los fogones, pero últimamente me he pasado a la olla a presión, que solo tarda media hora. No te limites a la ternera por tradicionalismo; es importante usar proteínas variadas en la dieta, para exponernos a todo un abanico de nutrientes. Por lo tanto, ve más allá de la ternera al hacer tu salsa boloñesa. La carne picada debería ser fácil de digerir y absorber, porque no solo está picada previamente, sino que es fácil de cocinar.

    Si haces mucha cantidad, como en esta receta, puedes congelar las sobras en porciones pequeñas para otro día.

    4 cucharadas de aceite de oliva virgen extra

    1 cebolla grande (o 2 pequeñas) pelada y picada fina

    4 dientes de ajo pelados y picados

    2 tallos de apio picados finos

    1 kg de carne picada de buey o cordero ecológicos

    1 lata grande (800 g) de tomates pera enteros (los prefiero enteros a troceados porque me parece que conservan más el sabor)

    1 cucharada de concentrado de tomate

    4 cucharadas de caldo de pollo

    1 manojo de romero fresco lavado y con las hojas picadas finas

    1 cucharadita de sal marina

    Pon el aceite a calentar en una olla (o, si lo prefieres, en una olla a presión) a fuego medio y sofríe la cebolla, el ajo y el apio. Añade la carne picada y deja que se dore, removiendo de vez en cuando.

    Incorpora los tomates y el concentrado de tomate, el caldo de pollo, el romero y la sal y remueve, deshaciendo suavemente los tomates pera con una cuchara de madera.

    Cocina a fuego lento sin tapar del todo la olla durante 3 o 4 horas, o durante 30 minutos en la olla a presión, siguiendo las instrucciones del fabricante.

    Para los «espaguetis» de calabacín:

    1 calabacín mediano por persona

    2 cucharadas de aceite de oliva virgen extra

    1 pizca de sal marina

    Corta los extremos de los calabacines y pásalos por un espiralizador. Si no tienes espiralizador, corta los calabacines en medias lunas. Pon una cucharada de aceite de oliva en una sartén, añade los calabacines y déjalos un par de minutos al fuego hasta que se ablanden. (Las medias lunas podrían tardar un poco más.) Sazona con sal marina.

    Sirve los espaguetis ya emplatados, con una ración de salsa boloñesa por encima.
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