Socorro (pero me dicen Coco)

No que a mí me haya pasado nunca algo así, obviamente, si yo soy una niña bien y decente y nunca había probado el alcohol antes de ayer, pero a muchas niñas en Querétaro les pasaba y cada vez era un escándalo

Porque aquí no vamos a ser más que unas señoras ociosas que tienen hijos y maridos. Y ya

Porque éste es un mugre pueblo donde no pasa nada, Coco —

Me paro y oigo a Monse decirle a Alfredo algo como que no se preocupe, que ella ha oído que después de casadas todas las mujeres vamos aprendiendo poquito a poco a ser amas de casa. ¡Y todavía el menso le contesta que eso espera! Me dan ganas de escupir en su vaso, ¿qué se cree esa escuincla mensa hablando a mis espaldas

cuando Alfredo pasó por mí, sí me dijo que si no preferiría ponerme algo con una falda tantito menos corta, pero cuando ya me iba a bajar del coche, me dijo que lo olvidara

Y no es que Querétaro esté mal, para nada. Es súper bonito y tranquilo; como dice mi papá, es una ciudad limpia y de gente decente y no un nido de malvivientes como el Distrito Federal.