Se buscó el mejoramiento de las condiciones sociales del país pero sin enfrentar, realmente, las raíces estructurales de la inequidad, asociadas a la concentración de la propiedad de la riqueza productiva, la formación de conglomerados económicos con altas cuotas de mercado, la existencia de un sistema educacional fuertemente segmentado por los niveles de ingreso de los estudiantes y sus familias, el débil poder de negociación de los sindicatos y otros factores que revisaremos en este capítulo.