Libros
Berta Marsé

Encargo

  • Marta Rimoldicompartió una citahace 3 años
    La reputación de chivata de Nati ayudó, actuando como una especie de escudo protector a modo de repelente. Me dejaban en paz. La medicación también ayudó, inmunizándome contras las miradas
  • Marta Rimoldicompartió una citahace 3 años
    De cómo era antes tampoco quedaba mucho rastro en el salón de los Lugano; por lo menos de la última vez que estuve allí, en mayo de 2008,
  • Marta Rimoldicompartió una citahace 3 años
    Había perdido la noción del tiempo pero había encontrado consuelo y cierta libertad en la apatía, en el ensimismamiento absoluto durante mis horas de estudio, en las siestas estratosféricas, en los paseos sin rumbo, en los chismes de pueblo,
  • Marta Rimoldicompartió una citahace 3 años
    Juan Holgado, sacudiendo la cabeza–, pero acaba de repetir segundo de bachillerato y no la han aprobado ni en gimnasia.
  • Marta Rimoldicompartió una citahace 3 años
    una americana rosa fucsia con hombreras y ese flequillo abombado típico de los ochenta. Aunque su postura parece más relajada que en el retrato contiguo, sigue habiendo un velo de tristeza en sus ojos; según mi abuela, porque tampoco entonces se quedaba preñada, y estaba asimilando su esterilidad al tiempo que iniciaba los trámites de adopción.
  • Marta Rimoldicompartió una citahace 3 años
    El estallido de la burbuja inmobiliaria supuso un descalabro para el sector del mueble, líder en la zona, y dejó un paisaje desolado de naves industriales, almacenes y talleres y establecimientos de venta vacíos. E
  • Marta Rimoldicompartió una citahace 3 años
    Hola, soy Sergio –le dijo, y se acercó con la intención de darle un beso, pero ella le hizo la cobra
  • Marta Rimoldicompartió una citahace 3 años
    Su silueta recortada a contraluz me espeluznaba y, por un segundo, se me pasó por la cabeza la idea de arrojarla al vacío, de empujarla a traición
  • Marta Rimoldicompartió una citahace 3 años
    ijo que le gustaba deambular de incógnito por las calles, pero que ya no reconocía el barrio, ni el barrio a ella, y que nadie la había visto aún excepto mi madre y yo.
  • Marta Rimoldicompartió una citahace 3 años
    nada que no se solucionase fácilmente con un poco de paciencia y sentido del humor, aunque de momento me añadiría a su lista de contactos como Erizo...
fb2epub
Arrastra y suelta tus archivos (no más de 5 por vez)