Os presentamos dos divertimentos literarios.
Como bien sabéis, los divertimentos literarios son para disfrutarlos y compartirlos.
Los divertimentos literarios no se pueden ni se deben leer en voy baja ni para adentro, ni para uno mismo.
Están escritos para ser es-cu-cha-dos.
Si realmente quieres disfrutarlos-compartirlos— y que los disfruten, tienes que leerlos en voz alta –sin exagerar el volumen-, claro está.
Que disfrute, pues, quien los escuche, tanto como quien los lea.