A Lydia se le ha encomendado la más sagrada y peligrosa de las misiones: descender al averno y localizar a un dios del sueño antes de que éste revele secretos que podrían aniquilar a toda su raza. Con lo que la protagonista no contaba era con terminar siendo cautiva del más feroz de los guardianes del Inframundo. A Seth se le está agotando el tiempo. Si no consigue hacerse con la llave del Olimpo y con el corazón de Zeus perderá no solo la vida sino también el alma. A pesar de las muchas torturas a las que ha sometido al dios del sueño que tiene bajo su custodia, no ha logrado arrancarle la información que necesita. Cuando aparece la bella Lydia para rescatarlo, Seth decide cambiar de táctica. Sin embargo, Lydia es la heredera de uno de los poderes más oscuros jamás conocidos. Si falla en su misión, un mal ancestral se desatará sobre la Tierra.