Dolores Ibárruri (1895–1989) escribió dos volúmenes autobiográficos. En este primero (publicado originalmente en el exilio, en 1962), la mítica dirigente comunista va desgranando, con notable pulso narrativo, su infancia en la cuenca minera vizcaína, su religiosidad temprana y el deseo frustrado de ser maestra, su matrimonio con un minero socialista y la maternidad trágica, así como la paulatina toma de conciencia y de un compromiso político creciente que la llevaron a promover, ya en el Madrid de la II República, el Comité Nacional de Mujeres contra la Guerra y el Fascismo, embrión de la Agrupación de Mujeres Antifascistas. Elegida diputada por Asturias en la candidatura del Frente Popular, Pasionaria encarnó la resistencia republicana durante la Guerra Civil –«¡No pasarán!»–, de cuyos avatares, que concluyen con la dramática derrota de la democracia, da rendida cuenta en estas páginas. El único camino rescata, pues, una memoria imprescindible, un testimonio de primer orden sobre la historia de España en un periodo crucial.La presente edición al cuidado del historiador Mario Amorós, autor de la biografía de referencia de Pasionaria, se ve asimismo enriquecida por las memorias inéditas de la única de sus seis hijos que le sobrevivió, Amaya Ruiz Ibárruri (1923–2018), que ofrecen un vívido contrapunto. Mujer excepcional y que dejó huella en varias generaciones, es preciso redescubrir a Dolores Ibárruri desde los desafíos actuales para las luchas que encabezó: la emancipación del género humano –cuando la utopía socialista está en proceso de reinvención con una poderosa vertiente ecológica–, el feminismo y la lucha contra un fascismo que, bajo nuevos ropajes, parece cobrar más fuerza cada día.