En sus artículos de costumbres, Larra adopta las formas costumbristas, dotándoles de una nueva perspectiva moral y reformadora. El propósito de Larra en estos artículos es proponer el cambio social e individual. Utilizaba la sátira para retratar los diferentes defectos que observaba, pero siempre con un afán didáctico y reformador. Sus ideas liberales se observan en los artículos de asunto político en los que defiende el progreso y la tolerancia, y critica el conservadurismo y el absolutismo. Su crítica más violenta iba dirigida contra el absolutismo del gobierno de Fernando VII y los carlistas, que representaba los males que amenazaban a la patria: el fanatismo, la ignorancia y el inmobilismo