Wow, wow, wow. Nueva regla. Ya no puedes huir de mí.
―No lo hago, pero necesito llegar a casa para poder llamar a mi papá.
―Tu teléfono está aquí, llámalo desde aquí.
―Necesito mi computadora portátil, es una llamada de tres vías con Ryan también.
―Tengo una computadora, Vee. Quédate aquí. Por favor. ―Su tono es de súplica, sus ojos me están rogando, y nunca he visto a este hombre arrogante tan desesperado y necesitado. De hecho, tengo que contenerme para no reírme de este lado inesperado de él.