La era del liberalismo, que floreció a finales del siglo XIX y comienzos del xx, la caracterizó el desarrollo de movimientos de masas y propuestas de reforma social interesados en las condiciones del trabajo fabril, la organización de sindicatos, los derechos de la mujer, la educación universal, la vivienda para los pobres, las campañas de salud pública y el socialismo. Esta era del liberalismo acabó verdaderamente con la Primera Guerra Mundial