Alice Thompson

El coleccionista de libros

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  • Ann Lopcompartió una citahace 7 días
    os cuentos de hadas tenían su propia ética, su propio y cruel sentido del bien y del mal que traspasaba la superficie de lo mundano.
  • Ann Lopcompartió una citahace 7 días
    Ya no estaba segura de si lo que se disponía a hacer era por venganza, por supervivencia o por ambas cosas, y tampoco le importaba.
  • Ann Lopcompartió una citahace 7 días
    Con la mente fría, Violet se percató de que Clara y Archie se merecían el uno al otro. Aquellos que traicionan a los demás, que mienten y engañan, se merecen a alguien como ellos. Como en una ecuación algebraica, son iguales y se anulan mutuamente.
  • Ann Lopcompartió una citahace 7 días
    Ahora era un ser formado por dos mitad
  • Ann Lopcompartió una citahace 7 días
    hora era un ser formado por dos mitades: mitad mujer, mitad madre. Dos cuerpos de distintos tiempos reunidos
  • Ann Lopcompartió una citahace 7 días
    Sabía que antes era más lista, pero algunas de las personas más inteligentes que conocía eran también las más desdichadas.
  • Ann Lopcompartió una citahace 7 días
    Un nuevo cuento de hadas en el que la retenían contra su voluntad.
  • Ann Lopcompartió una citahace 7 días
    Nunca subestime el ingenio de la mente. ¿Qué era eso que decía Shakespeare? «Hay más cosas en el cielo y la tierra, Horacio, de las que sospecha tu filosofía». La transitoriedad de lo físico es secundaria a la permanencia del arte y del genio. Los libros priman sobre nuestra insignificante mortalidad.
  • Ann Lopcompartió una citahace 7 días
    Aunque la gente siempre la desconcertaba. Todo el mundo actuaba de forma inesperada. Los seres humanos eran complicados e inconsecuentes... Había malas personas que hacían cosas buenas y buenas personas que hacían cosas malas.
  • Ann Lopcompartió una citahace 7 días
    A menudo se había dado cuenta de que solo cuando compartimos las mismas cualidades podemos reconocerlas en otras personas. La gente amable reconocía la amabilidad en los demás. Los que eran crueles la veían, sin embargo, como una debilidad que explotar.
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