Habéis visto Matrix? La película escrita y dirigida por los hermanos Wachowsky en 1999 nos enseña una sociedad totalmente alienada y teledirigida bajo una apariencia de total normalidad y libertad, la modernidad y el gran consumo a disposición de la humanidad. Todo falso, el poder dirigente manipula las mentes a un nivel nunca visto; un grupo subversivo escondido en dimensiones paralelas lucha contra ese poder…
La película fue célebre en su día por sus efectos especiales, persecuciones por los techos de los rascacielos, increíbles combates de karate, teletransporte de personas a voluntad…Pero bajo la frivolidad aparente se encuentra un tema recurrente en la historia de la humanidad: el eterno enemigo, el poder de la minoría dirigente que manipula a su conveniencia a millones de personas, y frente a él, la lucha por la liberación social.
El mismo tema recurrente que casi veinte años antes había tocado Miguel Angel Diéguez en Los Forajidos de la palabra, novela que tuvimos el placer de publicarle en 1981. Ya entonces la historia llevaba una dosis considerable de anticipación sociopolítica en la visión de la alienación masiva que impedía a la mayoría ver la realidad y reaccionar luchando por su futuro. Novela de anticipación, casi ciencia ficción, que se adelanta a su tiempo con claves visibles extrapoladas de la realidad que ya se hacía presente en nuestro país en aquella transición que no pintaba nada bien. Un grupo de intelectuales, héroes de comic con “poderes especiales”, lleva una vida contracorriente con enfrentamientos y conflictos permanentes por su trayectoria vital y su crítica descarada
