El universo consiste básicamente en materia oscura. No podemos verla, pero tiene una enorme fuerza de gravedad. La mente consciente —de manera muy similar al aspecto visible del universo— es sólo una pequeña fracción del mundo mental. La materia oscura de la mente, el subconsciente, tiene la mayor gravedad psíquica. Cuando no tenemos en cuenta la materia oscura del universo, aparecen las anomalías; cuando ignoramos la materia oscura de la mente, nuestra irracionalidad resulta inexplicable.