Hola ¿cómo estás?
Espero y deseo que bien, sabes la vida no es un cuento de hadas, ni de princesas, tampoco es como la pintan en las películas llena de fantasías y de finales felices. La vida es dura, difícil, golpea y regolpea fuerte, pero por duro que lo haga no te darás por vencido, te levantarás una y mil veces o las que sean necesarias para demostrarle de qué estas hecho, que eres valiente, guerrero, un ser incansable.
El camino es largo, difícil, complicado, lleno de baches, con bajadas y subidas pero, por terrible que esté, el final será asombroso, valdrá la pena, recuerda: «todo sacrificio tendrá su recompensa» por cada caída, una levantada, rendirse no es una opción, toma en cuenta que es imposible ir a la batalla y salir intacto, saldrás lleno de heridas, pero solo los cobardes evitan luchar por sus sueños y dejar de hacerlo es darte por vencido y no soñar es estar ya muerto .
Cada lucha, caída, fracaso, decepción, cicatriz, te hará más fuerte, duro, inteligente, capaz, tolerante, sabio, un ser renovado, listo para las batallas más feroces, serás indestructible, un ser perfilado para formar parte del «ejército celestial».
Recuerda:
“Dios les da las peores batallas solamente a sus mejores guerreros.”
Tampoco te dará más carga de la que puedas soportar, así que prepárate día y noche para enfrentar tus batallas, que estas en camino a convertirte en un “ser invencible”.
«Peleas o espera a ser derrotado, tú decides vivir de pie o en el suelo”.
Oscar González
