De la afición por lo infernal al consumo de drogas y alcohol a raudales, el campo del metal está sembrado de excesos y vidas licenciosas. La imaginación de estos muchachos, a la hora de vivir al límite no tiene precio. Cualquier cosa con tal de salir de la monotonía y convertirse en una estrella de la música.
Ese particular descenso a los infiernos de grupos como Metallica, Black Sabbath, Judas Priest, Motörhead y otros más, así como de alguno de sus componentes queda retratado en las páginas de este libro de forma amena y divertida por quien pasa por ser uno de los periodistas musicales de mayor proyección. El autor ha sabido elevar la anécdota, la curiosidad y la nota a pie de página a historia principal de uno de los géneros musicales que mayor trascendencia ha tenido en los últimos cincuenta años.
• Ronnie James Dio: Feo, bajito y genial.
• Alice Cooper, «una linda y dulce niñita escondiendo un hacha a su espalda».
• Great White: La banda con peor suerte del mundo.
• Motörhead y un funeral vikingo.
• Manowar: mitología nórdica y épica motera.