Los colores del cielo

Ahora entendía que los hilos de la vida no siempre se tejen como queremos. A veces el patrón al final de nuestras vidas es distinto de lo que imaginábamos que sería, y en aquel momento no tenía otra cosa que hacer más que reconciliarme con lo que quedaría de mí.

«¿Todos les ocultamos cosas a nuestros seres queridos? ¿Nos preocupa que, si descubren lo que hemos hecho, lo que somos realmente, dejen de querernos?».

suponía que era nuestro destino, así que no tenía sentido resistirse. Resistirse al destino solo provocaría más sufrimiento,

se suponía que era nuestro destino, así que no tenía sentido resistirse. Resistirse al destino solo provocaría más sufrimiento,

No me sentía desanimada, esclava de las expectativas que tenía de mí misma. Me sentía… libre.

—A veces soportamos una carga demasiado pesada en la vida. ¿Quién sabe cuándo una persona decide que no puede soportarla más?

veces hemos de encontrar una nueva vida, un nuevo sueño, sobre todo cuando los antiguos ya no sirven

«La única manera de rectificar nuestros errores es intentar deshacer lo que hicimos mal».